El polifacético Jimmy Barnatán
–músico, actor, cineasta y escritor– acaba de publicar su
segunda novela, New York Blues (La Esfera de los libros),
escrita en paralelo a la composición y grabación de su segundo
disco, After the blue times. Una obra que habla de rock, de
blues, de rythm and blues, de personajes y temas que se cruzan en la
capital del mundo, con una voz peculiar, personalísima y original
que retrata posiblemente a una generación, la de aquellos que están
cumpliendo ahora treinta años.
En la presentación, celebrada en el
espacio gastronómico Lavinia, el autor habló del proceso de
creación del libro, de las influencias y los motivos que le llevaron
a escribir la historia de Berko, un joven guionista que investiga la
vida y la muerte de un oscuro músico, que vuelve a Nueva York,
después de mucho tiempo de ausencia, a punto de cumplir treinta años
y con un sinfín de preguntas en la cabeza.
New York Blues tiene una base
autobiográfica. «Berko se parece poderosamente a mí. Sufre una
crisis de los 30», reconoce Jimmy Barnatán. «Lo que le
ocurre al personaje es que tiene vértigo ante la idea de posarse,
se resiste a dejar de ser joven». El autor también ha querido
resaltar la naturaleza fragmentaria de su novela, muy influida por el
cine. «El cineasta por excelencia de Nueva York es Woody Allen y hay
lugares de sus películas que aparecen en la novela, pero también
recuerda a películas como The Warriors y hay un poco de Scorsese».
La música es otro de los hilos conductores de la historia y el
propio creador apunta que en ella hay ecos de Miles Davis, Aretha
Franklin o B. B. King.
Nueva York es una ciudad que Jimmy
Barnatán conoce muy bien, ya que ha vivido largas temporadas en
ella: «Sigue siendo la capital del mundo y, para mí, es como un
paraíso perdido», asegura. En la novela ha dado voz a aquellos que
normalmente no la tienen, convirtiendo en protagonistas a personas
que siempre cumplen el rol de secundarios o figurantes. De ritmo
trepidante, tanto como un videoclip, New York Blues habla de
música y de cine, de memoria y de miedos, de sexo y de tentaciones.
Y como en un blues, conviven en ella el humor y la ternura, la
violencia y la esperanza, la nostalgia y el futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario