Maestros del dibujo

Por Luis Conde

Como un especial regalo de Navidades a sus perseverantes visitantes, el Museo ABC del Dibujo ofrece dos excelentes y muy curiosas exposiciones comisariadas por el preciso historiador del Arte Felipe Hernández Cava.Ambas se mantendrán hasta el mes de enero del próximo 2013.

Con un total de más de cuatrocientos dibujos originales conservados en los fondos del Museo, se exponen las líneas de lo que fue una publicación señera en la historia del periodismo gráfico español. 

Gente Menuda surge un año después que su alma mater ABC, en 1904, como un suplemento encartado en la gran revista Blanco y Negro. Eran cuatro páginas mensuales dedicadas expresamente a los niños. La primera aparición, pues, es del 23 de enero de 1904 y abarcaría doce números.

En su segunda etapa ya dentro del ABC, desde el 15 de febrero de 1906 hasta el 14 de diciembre aparecen otros cuarenta y dos números con cuatro páginas semanales, primero los jueves y luego los viernes.

Y ya en 1908 se independiza y aparece los domingos con dieciséis páginas y al precio de diez céntimos, sosteniéndose con alguna publicidad durante cincuenta y dos números. Durará hasta el 29 de mayo de 1910, cuando cierra con su número 126, para regresar a sus orígenes, como cuatro páginas del Blanco y Negro en junio de ese mismo año. A trancas y barrancas aguanta en esas páginas hasta el 27 de diciembre de 1914 en que deja de aparecer. 

Hay que esperar catorce años para que el 20 de mayo de 1928 reaparezcan esas míticas páginas para niños en Blanco y Negro con el título de “Suplemento Infantil” y sin numeración alguna. Pero será la etapa en que surge el personaje “Celia” de la imaginación de la excelsa Elena Fortún y las historietas con “Roenueces” de López Rubio, la época más prometedora de la publicación, que ante el éxito de sus seguidores que recortan esas páginas, el 3 de enero de 1932 decide convertirlas en una publicación exenta, gratuita, insertada entre las páginas de su madre acogedora. Y así aguanta con éxito imparable hasta julio de 1936, cuando tras el estallido de la guerra civil, deja de aparecer.

Un conjunto de dieciocho años con altibajos, tanteos, errores y estupendos aciertos para un suplemento infantil verdaderamente singular.

Esta peripecia editorial se muestra con secciones dedicadas a los ilustradores y portadistas, los escritores de relatos y textos periodísticos, para completar las páginas de los historietistas. Unas doscientas hermosas piezas, que dan una excelsa visión de lo que fue aquella publicación insuperada.

Las vanguardias artísticas están representadas por un conjunto de extraordinarios dibujantes y no menos los creadores literarios. Los inicios del siglo XX en España, se muestran con todo su esplendor.

Quien recorre la muestra, añora que aquello no siguiera después del conflicto bélico, como tantas otras cosas que se perdieron en la España de los cuarenta.

Y para quien quiera saber más, puede subir a la primera planta del Museo y allí disfrutar también con otras tantas piezas de ilustración, historietas, recortables, portadas, carteles y mapas del prolífico artista Francisco López Rubio, hermano mayor y menos conocido que el dramaturgo José López Rubio.

Este granadino dibujante, caricaturista, ilustrador, pintor, diseñador y grafista, fue uno de los pilares de Gente Menuda y habitual colaborador en ABC y Blanco y Negro, por lo que la muestra complementa armoniosamente la exposición dedicada al famoso suplemento infantil, una de las cumbres de Prensa Española y de su creador Torcuato Luca de Tena.

López Rubio es uno de los componentes de la llamada “Otra generación del 27”, junto a Mihura, Tono, Xaudaró, Sancha, Atiza, Regidor, Gascón, Cilla y otros más. Una pléyade de creadores que empatizaban con las corrientes artísticas que primaban en Europa y el resto del mundo. Nuestro país estaba a la altura y no desmerecía en absoluto. 

Recorriendo las dos exposiciones, se comprueba sin ninguna duda.